En Huelva, con los estrenos y el calor de una querida ciudad
Inimaginable era el escenario que nos deparaba en la Casa Colón de Huelva para uno de los últimos momentos de esta Cuaresma que, poco a poco, va llegando a su final más esperado. Y es que han sido muchos los momentos que llevamos vividos cada fin de semana para que sigamos sorprendidos del calor del público onubense.
Bello auditorio con aforo completo y un bonito fondo con los titulares de la Hermandad de las Tres Caídas de Huelva fueron testigos de un repertorio con tres estrenos, una composición que participa menos en nuestros conciertos y dos bises para culminar.
Bajo la dirección y batuta del maestro Don Vicente Moreno, sonaba Refúgiame para abrir la sesión. El telón iba dejando entrever lo que antes de empezar se presumía, un público volcado y lleno de emociones cigarreras.
Siguieron a ésta Luz de Misericordia, Una palabra tuya y Cordis Mariae, de Rafael Vázquez y Francisco Javier Torres respectivamente, dando aires de Viernes Santo en Huelva.
Llegaba el tiempo para disfrutar de dos composiciones que mucho están deleitando en esta Cuaresma, Ave María y En mis recuerdos, adaptada por Dionisio Buñuel y de Pedro Pacheco respectivamente.
Tras el descanso, un plato fuerte: Ante Anás, el Hijo de Dios, Noches de Lunes Santo, Prendido y Ante Caifás, el Hijo de Dios.
Pero antes de irnos y, para agradecer al público presente, interpretamos dos composiciones más con dedicatorias ambas muy especiales a compañeros músicos que, a pesar de todo, quisieron acompañarnos en el escenario: Y fue azotado y Costalero del Soberano, con la que pusimos el broche final a la tarde.
Son pocos los ensayos que nos quedan. La Semana de Pasión se atisba en el horizonte de nuestro calendario. Muy pronto, la pasión de Sevilla se vivirá, según Sevilla.
Foto: Magaly Ortíz García