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Martes Santo 2016: Dulce Nombre de María para un día marcado por la lluvia

Tras una noche extraña de Lunes Santo debida a la notoria ausencia de algunas hermandades, Sevilla despertaba en la mañana del Martes 22 de Marzo con un cielo gris y una abrumadora ola de incertidumbre. En mitad de esta jornada tan delicada, la Hermandad del Cerro del Águila decidía poner su Cruz de Guía en la calle: comenzaba el Martes Santo.

Cuando todo el barrio del Cerro se echó a la calle para acompañar a sus Sagrados Titulares a la Santa Iglesia Catedral, el día empezó a tornarse en un mar de nubes grises que no traerían buenas noticias. Con un paso acelerado y la angustia provocada por los agoreros partes meteorológicos, la Hermandad conseguía llegar hasta la Catedral entre algunas gotas de lluvia y aplausos de los espectadores allí presentes. Desde este momento, el día se convertiría en un vaivén de claros, lluvias, buenas y malas noticias. Así, tras una continuada tregua de lluvia, Hermandades como San Esteban, San Benito o Los Javieres abrían sus puertas para comenzar sus respectivas Estaciones de Penitencia. La jornada volvería a truncarse una vez más, cuando en torno a las 18:00 horas volvían las lluvias a la capital hispalense. El Martes Santo estaba roto.

La incertidumbre predominaría en toda la ciudad durante varias horas. Por un buen periodo de tiempo el Martes Santo quedó detenido: Hermandades que se dieron la vuelta, otras que se habían refugiado y otras que directamente decidieron no realizar Estación de Penitencia. Pese a todo, y en medio de un ambiente algo confuso, llegaron las buenas noticias desde San Lorenzo: La Hermandad del Dulce Nombre decidía atrasar su salida procesional con la intención de llegar a la Santa Iglesia Catedral.

Así, tras una espera prudencial y con una tregua considerable de las lluvias, se abrieron las puertas de San Lorenzo para que la cofradía realizase su tradicional salida procesional. Cabe destacar que el recorrido se vio modificado respecto al tradicional recorrido que ha realizado la Hermandad años atrás. Poco después de la campana que indicaba las 21:00 horas, la peculiar alfombra roja ya tenía sus primeras gotas de cera y una marea de túnicas blancas empezó a inundar las calles de fe y devoción.

Con los ciriales en la puerta y un respetuoso silencio en la Plaza, el primero de los pasos de la corporación del Martes Santo avanzaba por la nave central de la Parroquia marcando el comienzo de nuestro ansiado acompañamiento.

Ya con el Misterio en la calle y tras la melodía de la Marcha Real, los acordes de Señor de Sevilla sonaban mientras el misterio reviraba hacia la Basílica del Gran Poder, donde el Señor de Sevilla aguardaba tras su multitudinario besamanos. Con la composición Mirada de Dulce Nombre y un majestuoso andar de la cuadrilla, el paso de Nuestro Señor abandonaría poco a poco la Plaza de San Lorenzo para buscar la calle Conde de Barajas y llegar hasta Trajano.

En esta confluencia de calles, viviríamos uno de los momentos más importantes de nuestro Martes Santo: La composición estrenada en la cuaresma de 2016 Ante Anás, el hijo de Dios, de Cristóbal López Gándara, sonaría por primera vez tras el Señor. Tras la interpretación de dicha obra, el Misterio de Jesús Ante Anás discurría ya por la calle Trajano en busca de la Carrera Oficial. Con la marcha Sobre los pies te lleva Sevilla nos aproximaríamos a nuestro segundo paso por Campana en la Semana Santa de 2016.

La entrada en Campana sería uno de los momentos álgidos del recorrido, interpretando las siguientes marchas: Luz de Misericordia (estrenada también de este mismo año), Dulce Nombre de María, Sagrado Decreto y En mis recuerdos…

Un repertorio de corte clásico sonaría tras el Señor con marchas como Y tú, Estrella o Eucaristía hasta llegar a la Catedral. Una vez realizada la Estación de Penitencia en la Santa Iglesia Catedral, el blanco cortejo bofetero emprendía un regreso  algo acelerado para evitar las lluvias que se preveían a las horas más tardías de la noche. Así, con Llora la Esperanza enfilaría la calle Hernando Colón para discurrir con la marcha Nuestro Padre Jesús del Gran Poder por los aledaños del Banco de España.

Puntos como la Plaza Nueva, la calle Tetuán o la Campana de vuelta centran las grandes chicotás de esta parte del recorrido de la Hermandad. El andar del paso de misterio por la calle Tetuán iría marcado por marchas como Reinas del Baratillo o Pasión, Muerte y Resurrección, para disfrute del selecto público allí presente. En el segundo paso por Campana sonarían Al pie de tu Santa Cruz y Trabajadera de Metal.

La modificación que sufrió el recorrido por las inclemencias meteorológicas nos dejó una estampa diferente de la vuelta de la Hermandad: No pasaríamos por la calle Jesús del Gran Poder. En su lugar, la calle Trajano sería la que viviría de nuevo ese andar tan característico del misterio, una oda a la sevillanía cofrade. Madre Cigarrera sonaría tras el Señor momentos antes de que llegara a la Plaza de San Lorenzo.

La entrada de esta Hermandad se convierte en uno de los momentos más puros del Martes Santo. Con un escenario idílico, la Plaza de San Lorenzo aguardaba a oscuras la llegada del misterio y los acordes de Las Cigarreras, que seguiría poniendo música al andar del misterio con los sones de Y fue Azotado, Costalero del Soberano y la Marcha Real.

Poníamos así fin a un Martes Santo marcado por la inestabilidad meteorológica, pero que nos dejó unas estampas cargadas de sentimientos e ilusiones tras Jesús Ante Anás. Hoy queda menos para un nuevo Martes Santo en San Lorenzo.

Fotos: Tomas Quifés y Joaquín Galán

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